Los concentrados de aceite de pescado tienen un alto contenido de EPA y se obtienen principalmente de las anchoas y/o las sardinas o contienen una gran cantidad de DHA y se obtienen generalmente de los aceites de atún.
En la actualidad existe una creciente demanda de aceites concentrados con altos niveles de ácidos grasos poliinsaturados (PUFA), en particular para el suministro de cápsulas de aceite concentrado que permiten reducir las capturas para una cantidad equivalente de producto activo. Se trata de un proceso químico de concentración que puede complementarse con un segundo proceso enzimático.
Para obtener aceites con un alto contenido en ácidos grasos poliinsaturados, los aceites se concentran primero mediante un proceso que transforma los triglicéridos (TG) en ésteres etílicos (EE) que implica el uso de un disolvente como el etanol. Los ésteres etílicos son una forma química artificial, no se dan en la naturaleza.
Es posible un paso adicional para devolver los ácidos grasos a su forma natural (TG). Esta nueva concentración se realiza con la ayuda de enzimas que permiten devolver los ácidos grasos a la forma de triglicéridos, una forma más estable y resistente a la oxidación.